
El ciclista sanducero Ciro Pérez cambiará de equipo para el próximo año: dejará Italia y la malla del Mg.K Vis, para mudarse a Francia y sumarse al AVC Aix Provence Dole a partir de enero.
El pedalista, que tuvo un gran año representando a Uruguay, busca cambiar de aire y sumarse a un equipo Continental UCI, con un calendario de carreras más extenso y pruebas que se adapten mejor a sus características. Además, sabe que su nuevo equipo es filial del Cofidis, conjunto del World Tour, por lo que tendrá toda la atención.
“Ya tengo ganas de volver”, dijo Ciro a Chicos las Pelotas, apenas unos días después de cerrar la temporada. “El año deportivo se hace largo, pero se disfruta”, aseguró.
Hasta enero, el pedalista estará en Uruguay. Luego será tiempo de iniciar un nuevo capítulo en su carrera: se mudará a Aix-en-Provence, cerca de Marsella, donde su nuevo equipo tiene una casa grande para alojar a los corredores extranjeros.
“Lo decidí hace poco, un par de semanas”, comentó sobre el cambio de equipo. “Me contactaron después de una carrera en Poggiana, donde quedé quinto, por julio o agosto. Me preguntaron qué iba a hacer el año que viene, si me interesaba sumarme al equipo. Pero preferí esperar”, relató.
Pérez no quiso dar una respuesta en aquel momento. El Mg.K Vis quería mantenerlo en sus filas, y había otras ofertas tentadoras. “Esperé al Mundial, porque podrían abrirse otras puertas. Y me fue bien: aparecieron más equipos, firmé con un mánager y me decidí por este nuevo equipo”, contó.
¿Por qué el AVC Aix Provence Dole? Pérez asegura que priorizó lo deportivo al firmar por un año, pensando en la posibilidad de dar el salto a un equipo World Tour o Pro en 2027.
“Le di prioridad a lo deportivo: tener oportunidades, un buen calendario de carreras —sobre todo que se adapten bien a mí—, un equipo competitivo, compañeros fuertes que puedan ayudarme o a quienes yo pueda ayudar. Busco un grupo parejo y, más que nada, la posibilidad de pasar a un equipo World Tour. Mi nuevo equipo es más reconocido en la máxima categoría del ciclismo; los equipos grandes lo conocen y están más pendientes, porque es un equipo de desarrollo del que han salido muchos ciclistas buenos”, explicó.
Ciro tiene un nuevo desafío por delante. Atrás quedó aquel primer año duro en Italia, y este 2025 en el que logró adaptarse mejor. Y la primera experiencia europea, en Bélgica. “Lo fácil era quedarme en Italia: el equipo quería que me quedara, tenía otras ofertas, pero decidí jugármela por un país nuevo. Además, es más fácil llegar a la máxima categoría desde Francia que desde Italia, por mis características”, confesó.
El sanducero reconoce que “no soy un escalador puro, y en Italia muchas carreras tienen subidas duras, por lo que no puedo estar entre los mejores. En Francia es distinto el terreno: más ondulado, influye más el viento, la posición en el grupo… y son cosas que se me dan bien. Las subidas cortas son las que mejor me van, las explosivas, y las carreras más nerviosas, con más tensión y más duras en general durante toda la prueba”.
Ahora es tiempo de descansar, de aflojar tensiones, de disfrutar de la bicicleta pero de otra manera, más recreativa —“para salir y charlar con los amigos”—. No se olvida del gimnasio ni del contacto permanente con Daniele Della Tomasina, su entrenador en el Mg.K Vis, que seguirá siendo su guía en esta nueva etapa.
“Negocié con el equipo que él siguiera siendo mi entrenador, porque nos hemos llevado muy bien. Era importante para mí, y me lo permitieron. Es algo común en el ciclismo: si uno se encuentra bien con un entrenador, los equipos te permiten seguir con él, porque también les conviene que andes lo mejor posible”, remarcó Pérez.

